Mermelada de naranja amarga

La mermelada amarga es uno de los elementos básicos de un buen desayuno inglés. Es su preferida para untar en el pan, y también la mía.

Aunque su proceso no es complicado, si que lleva largo tiempo de preparación, sobre todo porque hay que esperar 24 horas para la maceración de la naranja con sus semillas.

Las semillas de las naranjas son preciosas materias primas en la fabricación de la mermelada, por eso debes guardarlas y utilizarlas para espesarla, ya que tienen una alta concentración en pectina.

Hay que envolverlas en una telilla de gasa y dejarlo que macere con el resto de la naranja para obtener una textura suave y gelatinosa. Y este sencillo método, facilita todo el proceso muchísimo.

Ingredientes para la elaboración de 6 tarros de mermelada:

• 750 gr de naranjas amargas
• 1 kilo y medio de azúcar
• 1750 ml de agua

Herramientas:

• Un exprimidor
• Una mandolina
• Una gasa fina
• Un recipiente grande
• Una olla grande
• Tarros de cristal
• Embudo para mermeladas

Preparación:

1. Un día antes, lava y seca las naranjas frotando la piel para eliminar toda la suciedad adherida. Corta el tallo de la parte superior. Corta las naranjas por la mitad y exprímelas, reservando todo el jugo extraído en un recipiente grande.
2. Recolecta todas las semillas de las naranjas y resérvalas, ya que serán la fuente de pectina necesaria para espesar la mermelada.
3. Corta en juliana toda la piel de las naranjas, en tiras muy finas con un cuchillo muy afilado o una mandolina para que re resulte más sencillo. Después colócalas en el recipiente donde se encuentra el jugo recolectado.
4. Sobre una gasa fina, coloca las semillas de la naranja que habíamos guardado, envuélvelas y átalas para que no se salgan. Introduce las semillas en el recipiente con el jugo y la ralladura de naranja. Este recipiente lo vas a tapar con un paño limpio y lo vas a dejar macerar durante 24 horas en un lugar fresco o en la nevera.
5. Al día siguiente, transfiere el contenido del recipiente en una olla y ponla a calentar a fuego medio durante 1 hora.
6. Al cabo de la hora, saca la gasa con las semillas y agrega el azúcar. Remueve todo el contenido con una cuchara de madera para que el azúcar se distribuya bien y se disuelva.
7. Tienes que dejar que la fruta cueza a fuego medio-bajo durante 20-30 minutos, hasta que adquiera una consistencia más espesa, revolviendo a menudo.
8. Después de los 20 minutos, comprueba la consistencia, para ello saca una cucharada de la mezcla y ponla en un plato. Gira el plato para que veas lo que le cuesta moverse. Lo ideal es que le cueste un poco, pero no demasiado, ya que se espesa más cuando se enfría y se nos quedará muy dura. Tiene que tener un color brillante y la ralladura de la piel tiene que está casi transparente.
9. Es en ese momento cuando lo tenemos que retirar del fuego. Llena los tarros de la mermelada con ayuda de un embudo, hasta arriba del todo. Coloca un trozo de papel de film tapando los el tarro y, a continuación, la tapa. Dale la vuelta al tarro y mantenlo así hasta que se enfríen por completo.

¡Ya puedes disfrutar de tu mermelada de naranja amarga casera!